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En esta entrada te comentaré sobre las principales ventajas y desventajas que conlleva comprar un vehículo usado. Hay que resaltar que la condición de vehículo usado aplica para cualquier vehículo que ya no sea un vehículo nuevo, es decir, que en su factura de origen indique es nuevo. Los vehículos que venden bajo el concepto de “seminuevos”, en términos estrictos, ya son vehículos de uso, el término de “seminuevos” es un truco publicitario para referirse a vehículos usados no tan antiguos en lo que a su año-modelo se refiere.
Ventajas:
Precio de vehículo más accesible y negociable: Al ser un vehículo de uso, el precio es en la mayoría de ocasiones más accesible que si quisieras comprar un vehículo nuevo. Además, dependiendo a quién le compres el vehículo, puedes negociar el precio.
Menor riesgo de que el vehículo sea robado: Es un hecho que los delincuentes roban cualquier vehículo sin importar su año, lo cierto es que los vehículos nuevos son más propensos de ser robados con respecto a los vehículos usados.
Refacciones más accesibles, más económicas y con mayor variedad: Es más accesible adquirir refacciones de un vehículo usado que de uno nuevo, esto se debe a que cuando el vehículo es nuevo sólo puedes comprar las refacciones con el concesionario de la marca de autos, pero cuando un modelo lleva cierto tiempo en el mercado puedes conseguir la mayoría de sus refacciones en cualquier refaccionaria. Además, existe más variedad dado que puedes conseguir refacciones de marcas genéricas más económicas o incluso de marcas de mejor calidad que la que te brinda la refacción del fabricante.
Seguro del vehículo en general más económico: Si bien, es un hecho que el costo de un seguro para un vehículo lo determina una gran variedad de factores, como pueden ser: código postal, edad, sexo, uso del vehículo, entidad donde circula, año del vehículo, modelo del vehículo; y que además, hay casos documentados en los que el costo del seguro de un vehículo nuevo puede llegar a ser más económico que el costo de un vehículo usado; mayoritariamente el costo del seguro para un vehículo usado es menor en comparación con el de uno nuevo.
Menor costo de reparación y de los servicios: Los vehículos usados pueden ser reparados o se les puede realizar su servicio de mantenimiento en cualquier taller mecánico lo que abarata los precios, además, el hecho de que haya más disponibilidad de refacciones y más económicas genera que la reparación o mantenimiento de un vehículo usado sea de menor costo si se compara con la reparación o mantenimiento de un vehículo nuevo, sobre todo si consideramos que los primeros meses y kilómetros de uso del vehículo te ves forzado a realizarle todo con el concesionario para no perder la garantía del vehículo nuevo.
Créditos más económicos: Los créditos para adquirir un vehículo usado suelen ser más económicos que los créditos para adquirir uno nuevo.
Mejor auto a menor precio: Es raro quizá la forma en la que articulé este apartado. Con mejor auto no me refiero a que sea un auto bueno en sí o libre de fallos, a lo que hago referencia es que por el precio de un auto usado puedes comprarte algo tecnológicamente mejor que si utilizas esa misma cantidad de dinero para comprar un auto nuevo.
Te pongo un ejemplo ficticio con datos poco cercanos a la realidad: Con $300,000 pesos puedes comprar un auto nuevo que traiga frenos de tambor en el eje trasero, los vidrios sean manuales, la suspensión trasera sea una barra de torsión, traiga un radio convencional con bluetooth, aire acondicionado manual de una zona. Mientras que con esos $300,000 puedes comprar un auto usado cuyo modelo sea unos años más antiguo que uno nuevo, pero que traiga frenos de disco en el eje trasero, los vidrios sean eléctricos, la suspensión trasera sea independiente tipo multilink, traiga una pantalla de 8″ con funciones avanzadas y tenga aire acondicionado automático de doble zona. Esto sucede porque estarías comprando un auto que al momento de ser nuevo fue más costoso y el hecho de ya ser usado lo fue devaluando, al punto que se logró este efecto mencionado.
Desventajas:
Menor certeza jurídica: Al ser un vehículo de uso el riesgo de que el vehículo tenga algún problema legal (procedencia ilicita o que haya estado envuelto en un accidente) o administrativo (multas de tránsito, placas vencidas, tenencia vencida, verificación vencida) se incremente significativamente, situaciones que si bien sí ocurren en los autos nuevos (aunque no deberían de pasar) es menor la posibilidad con ellos.
Mayor riesgo de fraude: Si bien, en la actualidad aunque acudas con un concesionario legalmente establecido es posible que seas víctima de un fraude, lo cierto es que en la compra de un auto usado el riesgo de incrementa significativamente.
Mayor probabilidad de que el vehículo presente fallos mecánicos, eléctricos, estructurales, entre otros: Este es quizá el principal argumento que una persona suele utilizar para no comprar un vehículo de uso, el tema de los fallos en el vehículo, razón por la que terminan declinando a adquirir un vehículo nuevo con el fin de que no tenga fallos. Quiero comentarte que ni los autos nuevos están exentos de fallas, ya sea por negligencia del fabricante o por algo accidental. Pero sí, el hecho de que compres un vehículo usado incrementa significativamente la probabilidad de que el auto pueda presentar fallos en un futuro cercano, incluso que ya venga con fallos, esto se debe a muchos factores, por mencionar algunos: mal cuidado o uso por parte del dueño anterior, falta de mantenimiento o mantenimiento con líquidos o refacciones de baja calidad, choques del vehículo, etc.
No hay quién te responda por el vehículo: Si compras el vehículo usado en una agencia o con un vendedor institucional, por lo general te ofrecen una garantía que cubre los fallos del vehículo, la realidad se presenta en que este tipo de garantías están muy limitadas, adicional a esto, si los concesionarios ponen muchas trabas para aplicar las garantías de un vehículo nuevo, ahora imaginate para aplicarte la garantía de un vehículo usado; no digo que estas garantías estén de adorno, pero en general es muy complejo que se hagan válidas cuand el vehículo presenta fallos.
Por otra parte, cuando le compras un vehículo usado a un particular, incluso firmas un contrato de compraventa de los que venden en las papelerías, en este tipo de documentos se establece que a partir de que pagas el vehículo ya eres responsable y asumes cualquier desperfecto mecánico, eléctrico o de otro tipo que el vehículo presente y deslindas al dueño anterior por lo que deja de existir alguien que te responda por el vehículo y pasas a ser el responsable. Es evidente que hay excepciones, puede ocurrir que compres un auto usado que tenga dos meses de haber sido vendido como nuevo y aún cuente con la garantía del fabricante.
Elegir un modelo de lo que hay: Es correcto afirmar que al comprar un auto usado tú puedes elegir el modelo que deseas, pero esta decisión se ve completamente controlada por lo que está a la venta. Cuando compras un auto nuevo puedes elegir muchas cosas, que también están 100% gobernadas por lo que te ofrece el fabricante, pero al menos puedes elegir cosas como: color del carro, tipo de transmición, versión del modelo, accesorios, etc. de forma más amplia, pero cuando compras un carro usado puedes querer un modelo de color rojo con transmisión manual, pero resulta que ese modelo que quieres sólo lo encuentras a la venta en color negro con transmisión automática, a esto es a lo que me refiero, que la capacidad de elección se limita y a la vez se agranda. Quizá puedo sonar contradictorio, pero te explico: se limita por las razones ya mencionadas, pero a la vez se agranda pero en otro sentido, dado que por el mismo presupuesto tienes acceso a una mayor cantidad de autos usados que si quisieras acceder a un auto nuevo.
Acceso restringido a la modernidad: Las legislaciones van cambiando constantemente, hace unos pocos años en México el uso de frenos con sistema ABS (sistema de antibloqueo en el frenado, por sus siglas en inglés) no era obligatorio y actualmente sí, por lo que si compras un auto usado puede que te encuentres con un modelo que no tenga esa tecnología. Este punto aplica muy parcialmente, esto se debe a que si compras un carro que en su momento fue costoso puedes acceder a tecnología que incluso carros nuevos no tienen, por ejemplo, puedes comprar un vehículo modelo 2005 que tenga una tecnología llamada: control de velocidad crucero, mientras que puedes comprar un auto modelo 2023 que no cuente con esa tecnología. Pero, por regla general, al hecho de comprar un auto usado te restringe en cierta medida el acceso a la modernidad, dado que la tecnología va evolucionando constantemente.
Cuidados del vehículo a la medida del dueño anterior: Por supuesto, cuando tu eres el dueño del carro, los cuidados del vehículo son tu responsabilidad; incluso si otra persona usa el vehículo, tú eres el que le está dando ese poder de uso, pero no deja de ser tu vehículo. A lo que me refiero con este punto es que el dueño anterior ya hizo uso del vehículo antes que tú. Este punto no necesariamente es negativo, dado que puede que el cuidado por parte del dueño anterior haya sido excelente, pero coloqué este punto como una desventaja, por lo siguiente: si el dueño anterior no daba mantenimiento al motor o usaba productos de mala calidad, al final, tú deberás asumir las consecuencias que ese uso le haya generado al motor del vehículo; por otro lado, si la conducción del dueño anterior era mala, todo el daño o desgaste excesivo en la transmición, motor, frenos, suspensión, entre otras lo asumes tú; de igual forma, si ya existe un desgaste en la pintura del vehículo, asientos, puertas, vidrios, etc., todo eso lo deberás enfrentar tú como nuevo dueño, es por eso que me refiero que los cuidados que tiene el carro son a la medida del dueño anterior.
Como pudiste observar, adquirir un vehículo usado tiene muchas ventajas y desventajas. Aquí la clave para que tú decidas si comprar un vehículo usado o no está en determinar para ti qué es lo mejor.
En conclusión, comprar un vehículo usado es una decisión que no debe tomarse a la ligera, siempre deben valorarse las implicaciones que tendrá una adquisición de este tipo.